sábado, 10 de septiembre de 2016

Lo que  debe hacer un  colombiano para destacarse en el  ciclismo de élite
según el  instructor vallecaucano  Edgar García


El mundo del ciclismo agradece que  los pedalistas  colombianos irrumpan en las  principales competencias europeas de ruta porque son  deportistas que  garantizan espectáculo en plena  competencia, ganan  etapas y  se ubican en  los  primeros  puestos de las carreras europeas.
Los colombianos nos enteramos en los  noticieros que el ciclista Jarlison Pantano, de la ciudad de Cali, le  gane una etapa en un embalaje  al ciclista polaco Rafal Majkal en el Tour de Francia;  sabemos  que  Sergio Luís Henao es  un gregario importante  para Chris  Froom en el equipo SKY; nos  alegra ver que  Esteban Chávez luchó de codo a codo con Nivali por  ganar el Giro de Italia; y nos  emocionamos con Nairo Quintana.
 Edgar García,  entrenador que trabaja  para la Liga de Ciclismo del Departamento del Valle, señala que   un pedalista como el caleño Pantano monta bicicleta desde  niños en zonas destapadas cercanas a la casa  como  opción de entretenimiento.
Un Pedalista como el boyacense  Nairo Quintana tiene  facultades  innatas para ser  buen trepador debido a  que de pequeño empleaba el  velocípedo para  ir  a la escuela en  una región del país caracterizado por  estar  ubicado en  zonas montañosas que está a más de  2100 metros sobre el  nivel del mar.
Nuestros  escarabajos  son  identificados por  ex pedalistas o personas relacionadas al mundo ciclístico que  los envían  a  escuelas de formación para  ciclistas donde se trabaja en el dominio de la bicicleta y en la  parte  motriz.
El profesor García  señala  que  los  nuevos corredores fueron   vistos  por  instructores que notan  sus aptitudes  deportivas y los    vinculan a las ligas    de sus respectivos departamentos en donde se les  enseña aspectos  como  el desenvolvimiento de un ciclista en  la  montaña, el estudio de sus rivales, la  forma de desenvolverse en un lote y  el análisis de los recorridos que deben  afrontar en cada etapa.
Desafortunadamente en los  últimos años hemos visto que son contados  los ciclistas que dejan en alto el nombre de Colombia en las pruebas grandes de ciclismo ya que   en este momento  no hay  un equipo como Café de Colombia o  TEAM Colombia vinculado a la Unión Ciclística Internacional (UCI) para  recibir  invitación a correr en Francia España o Italia.
Este instructor señala que está  lejos la ausencia de ciclistas cafeteros en las  competencias importantes del viejo continente  ya que pedalistas  proyectan  salir de Colombia   para  ubicarse en países donde se practique el ciclismo y tengan  convenios con la UCI.
Estos  muchachos  se  hospedan en casas que  albergan deportistas y les suplen las necesidades básicas.  Este  entrenador vallecaucano señala que pueden haber alrededor de 300 ciclistas de diferentes nacionalidades a la espera de  ser contactados por  el representante de alguna escuadra.
Los equipos  que   reclutan a  nuestros ciclistas, los convocan  de acuerdo a las necesidades que deban suplir. El siguiente paso es analizar si  los  pedalistas  son buenos escaladores, tienen cualidades como  rodadores,  analizan su rendimiento en  pruebas a cronómetro.
Luego sigue la conquista de carreras cortas como como la  Vuelta a  País Vasco, el Tour de l’Avenir,  una Ruta al Sur o Vuelta a Romandía  para sumar kilómetros de experiencia con rivales que  participan en las pruebas importantes.
El profesor García manifiesta  que La Cuantificación de buenos resultados para  estos  hombres toma su  tiempo; viene después de caídas, pérdida de  valiosos segundos o  retraso en  la  llegada a meta.
La  historia  de Colombia en este  deporte   comenzó en los años  cincuenta con  el  pedalista de Marinilla Antioquia,  Ramón  Hoyos siendo  pentacampeón de la  vuelta a Colombia en los años  cincuenta; siguió Cochise con su record mundial de la  hora y siendo  Campeón del Mundo en la  prueba de 4000 metros persecución individual.
El presidente de la Federación colombiana  de Ciclismo Miguel Ángel Bermúdez entiende que  el ciclismo es una actividad familiar para  los colombianos, sabe que en regiones  montañosas de  Antioquia, Cundinamarca o Boyacá   podrían  buscarse   jóvenes  con potencial para  integrar  equipos como  el recordado Café de Colombia para  competir de tú a tú  con ciclistas  europeos en   etapas con final montañoso como los Lagos de Covadonga.
El país celebra en 1987  la  obtención de  la  Vuelta a España, en 2002 Santiago Botero  gana  la contrarreloj individual en  el  Mundial de Ciclismo y podemos darnos el lujo de  conseguir títulos  en  clásicas y  las competencias grandes de Europa.
El país no  puede contar con un  equipo  SKY,  BMC o TinKoff  que esté integrado por pedalistas nacionales pero hay personas como el profesor Edgar García que preparó a Jarlison Pantano para   obtener logros como el triunfo de etapa en Suiza y Francia con el fin de relevar  a Rigoberto Uran,  Esteban Chávez y Nairo Quintana en busca  de un jersey rosado,  un maillot rojo o la camisa amarilla en las grandes pruebas de ruta del mundo.




















No hay comentarios:

Publicar un comentario